viernes, 30 de marzo de 2012

Bajo el suelo


Estaba apoyada sobre la encimera, el estaba frente a ella gritando insultos, cada vez más cerca de ella. Alzó la mano y la dejó caer propinando un golpe sonoro y duro sobre su joven mejilla.

De sus ojos brotaron dos lágrimas clandestinas que se deslizaban sobre su rostro como las gotas de rocío lo hacen por las hojas a primera hora de la mañana. Llevo su mano a su labio y notó el tacto viscoso de su sangre mezclada con sus lágrimas, mientras su mano temblorosa se retiraba de su labio ligeramente hinchado y sangrando en su mente se sucedían imágenes que entraban y salían en tropel, su primer beso con él, su primera caria, la primera vez que hicieron el amor, pero esas imágenes dejaron paso a otras menos agradables, su primer grito, su primer insulto, su primer guantazo…

Eran ya 4 años aguantando insulto tras insulto y no aguantaba más, ella no merecía eso, todas sus amigas se lo decían pero ella estaba cegada. Aunque esta vez el golpe la había despertado de su aletargado sueño, la devolvió a la realidad y en su mente sólo había odio hacia él y sólo se podía escuchar NUNCA MÁS, NO ME MEREZCO ESTO, ya no escuchaba sus gritos ya no sentía miedo a sus golpes.

Él volvió a alzar el brazo para propinarle un nuevo golpe, aunque esta vez el final sería distinto. María recorrió la encimera con su mano derecha sin retirar su mirada de él, hasta que encontró el cuchillo que estaba usando para cortar el queso para la ensalada. La mano de él comenzó a bajar, la imagen estaba pasando ante los ojos de María a cámara lenta, y antes de que la mano de él la golpeara María hundió el cuchillo en su abdomen. El se quedó petrificado mientas María armada de valor le dijo mirándole a los ojos –No m harás daño nunca más.

Hoy María ve pasar la primavera a través de una ventana con rejas, pasará dos años bajo condena, pero se levanta orgullosa, se levanta a sabiendas que el día de mañana volverá a respirar libre, volverá a acariciar el aire sin miedo a ningún hombre, mientras él… él se encuentra bajo el suelo.

Boikot-Bajo el suelo

lunes, 5 de marzo de 2012

Dulces Sueños....


Desearía entrar por tu ventana deslizarme bajo tus sabanas y abrazarte, un abrazo tan cálido que sería capaz de fundir el hielo de los polos.

Desearía sentir tu cabeza apoyada sobre mi pecho, sentir como tu aliento calienta mi alma, mientras seguimos abrazados.

Desearía deslizar mi mano bajo tu pijama y poder acariciar tu espalda con las suave yema de mis dedos, mientras suena Watermark en tu iPod.

Desearía poder despojarte del pijama para así poder coger la rosa que escondí bajo tu almohada y poder acariciar cada centímetro de tu espalda con ella, rosa azul que parece insignificante y áspera comparada con el color rosado de tu piel sólo iluminada por una tenue luz que se introduce furtivamente por lo pequeños agujeros de tu persiana, haciendo que un escalofrío recorra tu espina dorsal.

Desearía darte así las buenas noches dejándote yacer en tu cama con la sensación de la rosa recorriendo tu cuerpo, y escuchando como mi corazón se emociona por tenerte entre mis brazos.

Y cuando estuvieras a punto de sucumbir en los brazos de Morfeo susurrarte al oído que lo maravilloso de ti es cuando me miras a los ojos porque me haces sentir muchas cosas, me haces sentirme emocionado y al mismo tiempo aterrorizado, me haces sentirme mas fuerte y a la vez mas débil, la verdad que no se lo que me haces sentir pero se que eres maravillosa y que eres la mujer que quiero. Y con esas palabras me despediría de ti dejándote atrapada en un hermoso sueño mientras yo me alejo con la sensación de haber sido el mejor momento de mi vida. Has conseguido parar mi mundo simplemente con sentir tu respiración en mi pecho….Dulces sueños.